Caseros.
Ocurrió ayer a la tarde, a plena luz del día. Una familia llega a su casa y es sorprendida por una banda de seis ladrones, que aparecen en otro vehículo robado. Al no poder llevarse la camioneta, se roban el auto de una vecina.
Los casos se repiten y no alcanzan las horas de cada día para replicarlos en detalle. A todos los une la inseguridad. Como le ocurrió a esta familia de Caseros, cuando ayer llegaba a su casa tras una tarde de sol y descanso.
Las imágenes de una cámara de seguridad, que tomó toda la secuencia de este asalto, son contundentes. A plena luz del día, impunidad sin límites. Un hombre llega con su Chevrolet Spin, se baja y va hasta la puerta de la cochera de su casa. En ese momento, otra camioneta, color negro, frena en medio de la calle y de ella se bajan cinco ladrones, todos armados.
A punta de pistola, rápidamente reducen al dueño de casa y van hacia el vehículo, con claras intenciones de llevárselo. Pero arriba estaban la señora del hombre y sus hijos, uno de ellos discapacitado. El detalle sorprende a uno de los ladrones, que se da cuenta que no iban a poder sacar el sillín especial en el que viajaba la criatura. Otro se sube al asiento del conductor y trata de mover la camioneta, pero se baja.
La situación, crítica, estremece desde las imágenes. El dueño de casa trata de mantener la calma y saca a los chicos del vehículo, mientras que su señora se pasa del asiento trasero al delantero y pone la reversa, para dar un giro marcha atrás y quedar sola ante los delincuentes. Pone directa y sale hacia adelante, espantando a los ladrones.
Pero en la vereda, una hija más grande y el señor, con sus otras dos criaturas en brazos, corren para un lado y para otro. Los ladrones, armados, le gritan "ahora sí que te quemamos!". Un vecino abre la puerta de su casa y hace entrar a la familia. Mientras los asaltantes tratan de "llevarse algo" y la víctima pasa a ser otra vecina, que ve cómo se llevan su Peugeot 206, que también se lo ve en las imágenes.
Al final, casi dos horas después llegó la Policía, argumentando que ya tenían identificados a los ladrones porque venían cometiendo otros delitos, aunque hasta el momento no hay detenidos. De hecho, confirmaron que la camioneta en la que llegaron era robada y que el 206 que se llevaron apareció en la villa Carlos Gardel, sin sus neumáticos.
De todos modos, como se suele decir, fue una desgracia con suerte. Aunque al ver las imágenes, es increíble ver cómo los ladrones apuntan permanentemente, con el riesgo de disparar y provocar una tragedia. Un límite tan finito como la paciencia de la gente.
Nota de Verdad de la Mandarina: Menos mal que estaban los DIEZ MIL POLICIAS DE SCIOLI sino esta gente no se lo que hace.......
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