Por Fernando Vázquez
fvazquez@cronica.com.ar
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En la localidad bonaerense de Piñeiro, en el partido de Avellaneda, un sicario asesinó de manera accidental a su cómplice de 22 años disparándole un balazo en la cabeza, cuando su verdadero objetivo era matar a un mecánico, a cuya vivienda ambos habían concurrido, para perpetrar el ilícito. El responsable del terrible crimen logró fugar en una motocicleta y ahora es buscado intensamente por los pesquisas policiales. Las autoridades consideran que los delincuentes pretendían ejecutar al trabajador en un acto de venganza, porque el hombre tenía un hijo preso en la cárcel de Barker, quien habría estado involucrado en el fallecimiento de un recluso a raíz de una violenta disputa que algunos internos mantuvieron recientemente, en el establecimiento penitenciario.
Los voceros revelaron que el hecho se produjo a las 19:30 del viernes pasado cuando 2 sujetos arribaron a una finca situada en el cruce de Mario Bravo y Choele Choel. En el lugar vive Daniel José Rudival, de 59 años, quien se desempeña como mecánico.
Trascendió que los brutales marginales increparon al hombre, originándose un altercado.
De inmediato los delincuentes comenzaron a forcejear con el morador de la vivienda, hasta que uno de ellos, quien portaba una de fuego, no dudó en efectuar un disparo con el objetivo de matar al trabajador.
Sin embargo, el proyectil impactó en la región craneana de su cómplice, quien cayó ensangrentado, en la vía pública. Luego de ver lo ocurrido, el sujeto que había accionado su arma, subió a la motocicleta y huyó rápidamente del escenario del incidente. Momentos después los integrantes de la comisaría de Piñeiro (2a de Avellaneda) concurrieron al escenario del tremendo caso y establecieron que el individuo baleado había dejado de existir de manera instantánea como consecuencia de sus graves heridas. El occiso fue identificado como Jonathan Vázquez, de 22 años, en cuyo poder se incautó una pistola Bersa 22 largo. El joven residía en la calle Vélez Sarsfield, en Gerli.
Con respecto a los móviles de lo ocurrido, los pesquisas consideran que el hecho estaría vinculado a un asesinato entre reclusos, registrado días pasados, en la cárcel de Barker, donde se encuentra alojado Joan Manuel Rudival Ocampo, quien es hijo del mecánico y que está acusado de robo.
Aparentemente el familiar del trabajador estaría involucrado en este crimen y entonces, por motivos de seguridad, fue trasladado al penal de Sierra Chica.
Intervino en la causa, que fue caratulada “Homicidio”, el doctor Elbio Laborde, fiscal de la Unidad Funcional N° 2 de Avellaneda, dependiente del departamento judicial de Lomas de Zamora.
Nota de Verdad de la Mandarina: Gracias a Dios para el "Mecanico" estos sicarios eran argentinos; ahora no entiendo porque debe pagar el padre de este delincuente, lo hubiesen liquidado al hijo de paso eliminan una lacra más de la Argentina.
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