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martes, 22 de noviembre de 2011

CRIMEN DE TOMÁS: CUELLO MÁS COMPLICADO POR SU NOVIA, QUE MINTIÓ PARA CUBRIRLO


Tomás: según la novia de Cuello, él le pidió que mintiera para cubrirlo

22/11/11
A la Policía le había dicho que estuvieron juntos a la hora del crimen. Ayer cambió.

María Inés Márquez, actual pareja de Adalberto Cuello, declaró que el martes pasado, en el horario en que Tomás Dameno Santillán era asesinado a golpes en la cabeza, ella no estaba con él. Es más: aseguró que él le pidió que declarara eso para cubrirlo. Lo hizo ante el fiscal de la causa, Javier Ochoaizpuro, y derribó así una de las coartadas del acusado de “homicidio agravado por ensañamiento y alevosía”, ya que el sospechoso aseguró que había ido con su novia a cobrar una deuda. Ayer, los investigadores también probaron que el presunto asesino, en sólo 14 minutos, pudo secuestrar a Tomás, llevarlo hasta el descampado, matarlo y estar en su casa a las 12.53, cuando subió fotos en su cuenta de Facebook .
El martes 15, cuando Tomás desapareció, la Policía le tomó una declaración testimonial a María Inés. “A las 17 Adalberto la llamó desde la comisaría de Lincoln, donde estaba demorado, y le dijo exactamente lo que le tenía que decir a la Policía. Él es un psicópata que la manipuló siempre”, le contó a Clarín Marcelo Tuñón, abogado de la mujer. Según Tuñón, María Inés le hizo a caso a Cuello porque “tiene un poder absoluto sobre ella y la convenció de que no tenía nada que ver con el crimen”.

Pero ayer Márquez se presentó de manera espontánea y se rectificó en los tribunales de Junín. Según Tuñón, el martes ella se despertó temprano, tomó unos mates y luego planchó. A las 11, Cuello se levantó y a las 11.45 se fue de la casa, dónde ambos convivían, en la camioneta Fiat Weekend propiedad del padre de Márquez. Tomás, según las pericias, fue levantado cerca de su escuela a las 12.10. “Márquez llegó al colegio, donde es docente, a las 12.35. Antes habló por teléfono con Cuello y él le dijo que le iba a llevar el auto a la escuela, y así fue”, contó Tuñón.
Márquez también declaró que durante los dos días que Tomás estuvo desaparecido notó que su pareja “tenía una conducta sospechosa y cuando ella le preguntaba si había novedades del nene, Cuello se ponía molesto”, agregó Tuñón.
Cuello y Márquez se conocen desde hace 10 años. Se separaron dos años, cuando Cuello conoció a Susana Leonor Santillán, madre de Tomás, con quien tuvo un hijo. Según Márquez, la relación entre ellos fue “tormentosa. Se mandaban mensajes agresivos y ella le negaba ver al hijo de ambos”.
Ayer, los investigadores dieron también con elementos importantes para la causa. Un empleado del Auto Moto Club Lincoln, mientras cortaba el pasto, halló junto a unas cubiertas de contención una pala de punta, de caño, de 1,10 metro de largo. Luego encontraron enterrado un guardapolvo blanco talle ocho, con una escarapela en la solapa, y una mochila con un dibujo de “Power Rangers”; adentro estaban los útiles de Tomás. La Policía Científica ahora analizará si hay restos de ADN del asesino y si la pala que encontraron es el arma homicida .
La Justicia probó además ayer que Cuello pudo haber levantado a la víctima a la salida del colegio, asesinarla, llevarla al lugar donde se encontró su cadáver y regresar a su casa en apenas 14 minutos. Los investigadores realizaron los posibles recorridos y determinaron que, yendo a una velocidad de 40 kilómetros por hora , ir del colegio de Tomás al campo donde apareció asesinado demora ocho minutos, y luego otros seis hasta su casa. Una fuente de la investigación contó que “A Cuello le sobró el tiempo para buscar a Tomás a las 12.10 del martes, asesinarlo y estar en su casa a las 12.53, cuando ingresó a su Facebook para subir dos fotografías”.

GENTILEZA: CLARÍN

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